jueves, 30 de diciembre de 2010

Más Madera

Hoy estamos en Austria. Por ejemplo. Un pueblo en la montaña con un metro de nieve arrimado a todas las casas y los caminos despejados gracias al trabajo de los lugareños. Hace años no era un pueblo turístico pero una buena gestión de la zona ha hecho que aparezcan unos cuantos hotelitos muy bien cuidados. La mayoría de ellos tienen una decoración tradicional pero el nuestro se ha decantado por un toque moderno dentro de la calidez propia del entorno. El exterior del edificio no se distingue del resto pero en el interior la cosa cambia. Materiales de siempre trabajados con simplicidad y elegancia, sin esconder ninguna de sus cualidades. Y colores naturales, en este pequeño mundo parece que los tintes han dejado de existir. Nuestra habitación es una buena muestra de ello: nórdico de cuadros en lino y algodón, ropa de cama de algodón crudo, enrollable de yute natural y cortinas de cuadros de seda rústica. Y me dejo lo más importante para el final ¡la madera! Nos rodea completamente pero no agobia, aquí está en su elemento. Suelos, paredes, techos, cama con dosel, mesilla y hasta la barra de la cortina son de ese material. Lo que en la ciudad sería un exceso aquí es natural y casi hasta necesario. No me diréis que no es acogedora...

lunes, 27 de diciembre de 2010

Paris

Hoy estamos en París. Al menos yo quiero imaginar que es así. La mañana es fría, muy fría. La gran puerta del impresionante portal de esta antigua y elegante casa no es  si no un anticipo a todo lo que nos espera tras ella. Casi como el precioso papel que envuelve el regalo. Pero no hay otro remedio: hay que quitarlo para ver lo que hay dentro pero ¡es tan bonito! Esta puerta ya es de por si un tesoro y como tal no está desprotegido. Madame la concierge puede salir de cualquier rincón, no os descuidéis. ¿Será como la de La elegancia del erizo...?

domingo, 26 de diciembre de 2010

Comenzamos...

 Hola a todo el mundo. Comienzo este blog con la intención de compartir con todo aquel al que le interese minimamente la decoración  las sensaciones que un ambiente, una imagen o un objeto puede despertar en nosotros. Incluso sentimientos, no necesariamente positivos. Agradeceré vuestros comentarios y aportaciones, que creo nos pueden enriquecer a todos.

 Quiero comenzar con la foto de una casa maravillosa. Se la ve en lo alto de una colina, solitaria, con la única excepción de una roca que a mi modo de ver acepta la compañía de la casa pero proclamando de alguna manera la propiedad del entorno. "Tu has llegado después, pero si no molestas demasiado puedes quedarte" parece decir. Imagino a la roca mirando a mar siempre cambiante y recibiendo unos rayos de sol que se agradecen por lo inesperados. El clima es frío y húmedo pero hoy todo es diferente... ¿Os sugiere algo más? La historia puede ser incluso emocionante. O no.